Valdés toma el nombre de la Peninsula Patagónica, dónde sus dueños Mauro y Ana trabajaban de cocinero y moza respectivamente. Con la idea de abrir su propio restaurante se mudan a Córdoba dónde la cocina de Valdés exhibe una carta que propone platos con sabores únicos a través de opciones de pescados, mariscos, carnes, pastas caseras y paellas, todas opciones con un ligero toque a los Puertos del sur. La sugerencia de la casa pasan por la Tabla de Mar que llegan con: Rabas a la Romana, Langostinos al Ajillo, Langostionos Rebozados, Mejillones Sauvignon blanc, Merluza Rebozada y Vieiras Gratinadas."